La municipalidad de Resistencia enfrenta nuevamente problemas con la recolección de residuos, esta vez atribuidos a un conflicto gremial interno en la empresa Santa Elena, concesionaria del servicio hasta el 31 de julio. Sin una estrategia de contingencia efectiva, el Municipio se limitó a comunicar la situación a través de sus redes sociales durante el fin de semana.
Mientras la Municipalidad daba cuenta del gran trabajo de limpieza que se hizo en el Parque 2 de Febrero y en el Domo del Centenario luego de la multitudinaria y exitosa Bienal de Esculturas, culpaba a los empleados y empleadas por el servicio deficitario.
El conflicto se agudizó cuando la empresa Santa Elena decidió retirar todos sus camiones compactadores y los choferes dejaron de prestar servicio, según informó el Municipio mediante un comunicado. La explicación señala que esta decisión responde a un conflicto interno con los trabajadores, afectando gravemente a los vecinos de Resistencia. El Municipio argumentó que la ciudad ya sufría un servicio deficiente debido a la decisión de la empresa de ausentarse en ciertos turnos y horarios.
A partir del 1 de agosto, el Municipio asumirá la recolección de residuos en reemplazo de Santa Elena, empresa que es la transformación de Pimp que fue creada durante el mandato de Aída Ayala y Leandro Zdero como jefe de Gabinete municipal.
Camioneros criticaron la gestión municipal: “Esto claramente demuestra desidia de este gobierno apático sin conciencia social”
El Sindicato de Camioneros criticó duramente al intendente Roy Nikisch, señalando que son las autoridades municipales las responsables del conflicto. En un comunicado, el gremio detalló tres puntos claves: la existencia de problemas con la recolección, la falta de empatía con los trabajadores y sus familias, y el desconocimiento de las consecuencias de sus decisiones. “Una gestión oportuna debería haber previsto el destino de los trabajadores, asegurando su sustento y evitando la crisis actual”, afirmaron.
El sindicato también denunció la inaccesibilidad del intendente Nikisch para tratar este asunto crucial y destacó que, mientras se invierten millones en espectáculos para la Bienal de Esculturas, la ciudad se convierte en un basural a cielo abierto.
La lenta respuesta del Municipio
El secretario de Servicios Públicos del Municipio, Néstor Dellamea, anunció que en agosto comenzarán con la recolección utilizando equipamiento propio. Según sus declaraciones, contarán con 16 camiones propios y otros adicionales, con un total de 21 camiones para asegurar un buen servicio. Además, se adquirieron 300 contenedores, con los primeros 75 ya en circulación y el resto programado para llegar en los próximos dos meses.
Hechos policiales sin explicación
La crisis de la recolección se ve agravada por incidentes recientes, como el incendio en la cabina de un camión recolector en la intersección de la avenida Soberanía Nacional y la calle Lisandro de la Torre, y el accidente en el basural de María Sara, donde la tolva de un camión recolector se desplomó sobre tres personas. Estos incidentes permanecen sin esclarecimiento por parte de las autoridades.