El ticket que ofrecen los cajeros automáticos al retirar dinero podría convertirse en un problema de seguridad para los usuarios desprevenidos. Este comprobante, que detalla la transacción realizada y el saldo disponible en la cuenta, contiene datos sensibles que pueden ser utilizados por estafadores para cometer fraudes. Por esta razón, las entidades financieras y expertos en seguridad recomiendan optar por la opción de no imprimirlo.
Uno de los riesgos principales es que, si el ticket es desechado sin ser destruido adecuadamente, alguien podría recuperarlo y utilizar la información para acceder a datos personales y bancarios. Esto podría facilitar el vaciado de las cuentas de las víctimas, según alertan especialistas en seguridad financiera. Por ello, en caso de imprimirlo, es fundamental conservarlo o destruirlo completamente antes de descartarlo.
Además de evitar imprimir el comprobante, existen otras medidas claves para protegerse de estafas tanto en cajeros automáticos como en operaciones de home banking. Entre ellas, no compartir claves bancarias con nadie, evitar brindar los datos completos de las tarjetas, y asegurarse de que las comunicaciones electrónicas provengan de remitentes seguros. “Ningún operador bancario puede solicitar claves o datos confidenciales por teléfono, e-mail o redes sociales”, remarcan desde el sector financiero.
Activar alertas de consumo desde el home banking es otra práctica recomendada para monitorear movimientos sospechosos en las cuentas. Si se recibe un mensaje, llamado o correo solicitando información confidencial, lo ideal es cortar la comunicación y verificar con el banco directamente a través de los canales oficiales. Este tipo de alertas permite reaccionar rápidamente ante operaciones no autorizadas.
Cuidar la información bancaria personal es clave en un contexto donde las modalidades de estafa se diversifican y perfeccionan. Evitar imprimir el ticket del cajero automático es un paso sencillo pero efectivo para reducir riesgos y proteger los ahorros.