El juego contra el Arouca que el Benfica ganó 5-0, donde Ángel Di María marcó un gol de penal, habrá sido el último del argentino en Portugal. En los últimos días, el jugador de 36 años habría tomado la decisión de jugar seis meses en Rosario Central.
El campeón mundial exigió varias garantías de seguridad para aceptar la invitación. Esto fue discutido entre la dirigencia de Rosario Central y las diversas fuerzas policiales del país. De todas formas, Di María decidió que permanecerá solo en Argentina durante el próximo medio año y que viviría en Capital Federal, mientras que su esposa e hijas se mudarán, en principio, de Lisboa a Miami.
Esto significa que Rosario no será el punto final de su carrera: Inter Miami podría ser el siguiente paso, a partir de enero de 2025, en la nueva temporada deportiva Major League Soccer (MLS). Es menester recordar que el club donde juega Lionel Messi ya alcanzó el tope salarial impuesto por la normativa en 2023/2024.
De hecho, el futuro personal de Di María debería pasar por esa ciudad estadounidense, donde ya viven algunos miembros de la familia y varios ex futbolistas y donde también está haciendo varias inversiones.
Solución alternativa
Di María completará el plan que trazó en su cabeza hace aproximadamente un año: jugar una temporada en Benfica y luego terminar su carrera en Central, escenario que estaba siendo alimentado por el propio jugador en varias entrevistas concedidas a los medios argentinos, siempre con el sueño de jugar la Copa Libertadores con el equipo rosarino, cuya fase de grupos, sin embargo, no va bien.
En marzo, sin embargo, ocurrió un hecho que hizo repensar todo: las amenazas a su familia (incluidas sus hijas) de grupos vinculados al narcotráfico si regresaba a Rosario. A pesar de que la pandilla responsable de los mensajes había sido detenida posteriormente, incluido el autor intelectual de los ataques, Di María informó a Rosario Central y a muchos amigos que no volvería.
Pero a medida que pasaba el tiempo, el corazón y la promesa hecha al padre de que un día volvería a representar los colores “canayas” le hicieron cranear una solución alternativa: menos tiempo de contrato.
La 11 lo espera
Rosario Central competirá con Peñarol en Montevideo por el boleto a octavos de final de la Copa Libertadores (está en tercer lugar, a dos puntos del equipo uruguayo), y además planea recibir a tres ex jugadores: otro ídolo como Marco Rubén, delantero de 37 años, Di María (cuya camiseta 11 ya está reservada) y Franco Cervi, ex jugador del Benfica, actualmente de 29 años y que puede abandonar el Celta de Vigo.
Queda por conocer el tiempo del anuncio, porque todavía hay una reunión entre el agente de Di María y Rui Costa, pero las señales son demasiado evidentes: justo ayer Jorgelina Cardoso, la esposa del extremo, publicó un storie en Instagram, en cuya foto están las parejas Di Maria y Otamendi, que pasan sus vacaciones en Dubai, con un título: “Te extrañaremos. Hasta la próxima vez”.
